Participamos junto a la Iglesia Católica Apostólica Siriana Ortodoxa de Antioquía, miembros del cuerpo consular y distintos representantes de la comunidad siria, de la conmemoración de la salvaje matanza que sufrió esta comunidad de medio oriente en 1915, perpetrada por el imperio otomano.
A 109 años de aquel fatídico acontecimiento, renovamos nuestro compromiso con todos los integrantes de la comunidad para rechazar enérgicamente volver sobre estos pasos.
¡NUNCA OLVIDAREMOS!